HIMNOS a la DIVINIDAD
ABHINAVAGUPTA
BODHAPAÑCADASIKÂ
(QUINCE
ESTANCIAS
SOBRE
LA
CONSCIENCIA)
1-2.
Ese
Uno
cuya
esencia
es
la
inmutable
Luz
de
todas
las
claridades
y
de
todas
las
tinieblas,
en
quien
claridades
y
tinieblas
residen,
es
el
Soberano
mismo,
naturaleza
innata
de
todos
los
seres.
La
multitud
de
las
cosas
(la
objetividad
toda
ella)
no
es
nada
más
que
su
energía
soberana.
3.-
Y
la
energía
no
se
sitúa
como
algo
separado
de
la
esencia
de
aquel
que
la
posee.
Hay
eterna
identidad
de
ambas
(consciencia
y
energía)
como
el
fuego
y
su
poder
de
quemar.
4.-
El,
el
Dios
Bhairava
(la
Consciencia),
tiene
como
característica
la
de
mantener
el
universo
todo
entero
reflejado,
gracias
a
esta
energía,
en
el
espejo
de
su
propio
Ser.
5.-
Ella,
la
suprema
Diosa
(la
Energía),
se
entrega
a
la
toma
de
consciencia
de
la
esencia
de
Aquel
cuya
plenitud
en
todo
lo
que
existe
no
aumenta
ni
disminuye.
6.-
Este
Dios
se
entrega
eternamente
al
placer
de
jugar
con
esta
Diosa.
Omnisciente,
El
suscita
de
manera
simultánea
las
diversas
emisiones
y
reabsorciones
(de
la
manifestación).
7.-
Tal
es
su
incomparable
actividad,
eminentemente
difícil
de
realizar;
tales
son
su
libertad,
su
soberanía,
su
Esencia
consciente
de
si.
8.-
Es
cierto
que
una
luz
consciente
limitada
caracteriza
la
inconsciencia;
por
el
contrario
la
Consciencia
no
tiene
como
característica
a
la
inconsciencia
porque
la
Consciencia
no
tiene
límite.
9.-
Así
las
emisiones
y
reabsorciones
se
manifiestan
a
causa
de
su
propia
esencia
en
el
interior
del
Ser,
ellas
cuya
diferenciación
depende
de
las
energías
específicas
de
Aquel
que
es
esencialmente
libre.
10.-
Su
extrema
diversidad,
esos
mundos
arriba,
abajo,
intermedios
y
aquello
que
los
constituye,
he
ahí
la
existencia
(Samsara;
el
mundo
del
devenir)
dotada
de
placer
y
de
dolor.
11.-
El
imperfecto
conocimiento
de
este
Bhairava
(sobre
el
cual
reposan
las
emisiones
y
reabsorciones
de
los
mundos),
forma
parte
de
Su
libertad
(la
libertad
de
ocultarse),
ese
imperfecto
conocimiento,
en
verdad
es
la
transmigración,
terror
de
los
seres
entorpecidos.
12-13.-
Inclinación
de
Su
gracia,
tradición
del
maestro
o
tratados
religiosos;
que
por
una
o
por
otra
de
estas
aproximaciones
se
despierte
el
Conocimiento
perfecto
de
la
Realidad
(el
Señor
supremo)
he
ahí
la
liberación,
la
más
alta
soberanía,
la
plenitud
de
los
seres
iluminados,
he
aquí
además
lo
que
se
llama
liberación
en
esta
vida.
14.-
En
realidad
ninguna
diferenciación
existe
en
Paramesvara,
estos
dos,
atadura
y
liberación,
no
están
de
ninguna
manera
separados
de
la
Esencia
del
Señor
supremo.
15.-
Así,
entra
en
contacto
repetidamente
con
Bhairava
(la
Consciencia),
naturaleza
innata
de
todo,
que
reposa
en
el
loto
del
tridente
formado
por
las
energías:
conocimiento,
actividad
sutil
(la
actividad
anterior
a
toda
diferenciación
grosera
y
que
se
transforma
después
en
actividad
ordinaria)
y
voluntad.
Abhinavagupta
ha
compuesto
estos
quince
versículos
con
el
fin
de
iluminar
instantáneamente
a
los
discípulos
que
tengan
un
alma
delicada,
viva
y
sutil.
PARAMÂRTHACARCÂ
(INVESTIGACION
DE
LA
REALIDAD
ULTIMA)
1.-
Puesto
que
El
penetra
y
colma
todo
en
el
más
alto
grado,
El
cuya
esencia
es
luz
consciente,
El
no
brilla
separado
de
las
luces
del
sol,
de
la
luna,
de
una
lámpara,
etc.
Es
por
eso
que
las
expresiones
"iluminación"
e
"iluminado"
no
sirven
más
que
de
manera
relativa.
2.-
En
verdad
nada
está
separado
del
conocimiento;
y
la
diferenciación
nacida
de
la
variedad
no
existe
en
la
Consciencia.
No
se
encuentra
tampoco
la
distinción
específica
en
ese
ámbito
único
y
muy
puro,
por
si
mismo
luminoso.
3.-
Así,
Shiva,
Luz
suprema
del
universo,
no
es
más
que
unicidad,
Consciencia
indivisa
de
sí;
y
ahí
solamente,
en
la
energía
diversificada,
aparece
la
diferenciación
escindida
entre
poseedor
y
objeto
poseído.
4.-
En
consecuencia,
el
ser
diferenciado
no
es
distinto
del
poseedor
de
ese
ámbito
único
(Shiva),
muy
puro
y
autónomo;
de
la
misma
manera
como
casas,
elefantes,
caballos,
nubes,
ríos,
montañas,
etc.,
no
están
separadas
del
espejo
en
el
cual
se
reflejan.
5.-
Si
el
reflejo
en
el
espejo
y
el
objeto
reflejado
se
demuestran
como
reales
con
la
ayuda
de
criterios
lógicos,
para
las
cosas
percibidas
en
el
interior
del
espejo
de
la
Consciencia
autónoma
no
existe
ahí
otra
causa
(que
la
Consciencia).
6.-
Es
porque
Tu
no
eres
más
que
Consciencia
indivisa,
que
en
Ti
brillan
instantáneamente
los
mundos.
Ellos
fulguran
por
el
Esplendor
de
Tu
luz.
¡Tu
solo
eres
su
autor
oh
Soberano!
7.-
Canto
yo
así
la
alabanza
del
Señor
Bhairava
intuitivamente
vivenciado,
fuente
de
toda
certitud
y
que
escapa
a
las
pruebas,
Ser,
Soberano
que
no
tiene
soberano,
pleno
de
las
energías,
sin
espacio
ni
tiempo,
eterno,
omnipresente.
Aquellos
que
aspiran
a
la
Realidad
Ultima,
evocan
y
contemplan
sin
cesar
en
su
corazón,
de
la
manera
conveniente
(excluyendo
cualquier
otro
pensamiento)
estas
siete
estancias
perfectas,
se
absorben
constantemente
en
el
ámbito
absoluto
de
Bhairava
y
llevan
a
bien
la
investigación
de
la
Realidad
última
en
los
tres
mundos
(existencia
fenoménica,
no-existencia
y
lo
que
hay
más
allá).
ANUBHAVANIVEDANA
(OFRENDA
DE
LA
EXPERIENCIA
INTIMA)
1.-
Cuando
un
yogui,
el
aliento
y
la
mente
disueltos
en
el
objeto
percibido
interiormente,
mira
fijamente
(la
pupila
inmóvil)
y
a
pesar
de
ver
el
mundo
exterior,
no
lo
ve,
¡tal
es
en
verdad
el
sello
de
Shiva
producido
por
vuestra
gracia,
oh
Maestro!
Este
ámbito
libre
de
vacío
y
no-vacío,
he
aquí
la
Realidad
Shivaita.
2.-
Los
ojos
entreabiertos,
el
pensamiento
inmóvil,
la
mirada
fijada
en
la
punta
de
la
nariz,
sol
y
luna
(aliento
inspirado
y
expirado
y
también
la
dualidad
en
su
integralidad)
que
han
llegado
a
fundirse
en
la
intima
espontaneidad
del
triple
movimiento
(respiratorio),
él
alcanza
la
Realidad,
ese
ámbito
esencialmente
luminoso,
desprovisto
de
toda
exterioridad,
Ser
único,
eminente,
Esencia
suprema
¿qué
más
se
puede
decir?
3.-
Entonces
toda
palabra
surgida
de
su
boca
es
una
formula
sobrenatural
(mantra).
La
existencia
del
cuerpo
de
la
cual
proceden
el
placer
y
el
dolor,
he
aquí
la
posición
indescriptible
(asana).
El
flujo
espontáneo
del
aliento,
he
aquí
el
prodigioso
yoga.
Habiendo
degustado
el
absoluto
Esplendor
de
la
energía
divina,
en
verdad
¿qué
habría
para
mi
que
no
fuese
resplandeciente?
4.-
La
fórmula
(mantra)
que
impregna
inequívocamente
al
alma
es
aquella
en
la
que
no
se
distingue
ya
más
la
disposición
de
los
fonemas.
La
actitud
(mudra)
surge
espontáneamente
cuando
toda
actividad
corporal
ha
cesado.
El
yoga
se
revela
cuando
la
marea
del
aliento
se
detiene.
En
las
resplandecientes
fiestas
que
conducen
a
Tu
Esplendor,
en
verdad
¡que
hay
para
los
seres
avisados
que
no
sea
un
prodigio!
BHAIRAVASTAVA
(HIMNO
A
LA
GLORIA
DEL
ABSOLUTO)
1.-
Con
el
pensamiento
idéntico
a
Ti,
en
mi
corazón
rindo
pleitesía
(me
abandono
en
cuerpo,
palabra
y
pensamiento)
al
Señor
Bhairava,
refugio
del
que
no
tiene
Señor.
Hecho
de
Consciencia,
único,
infinito,
sin
origen,
El
impregna
la
diversidad
de
los
seres
móviles
e
inmóviles.
2.-
¡Oh
gran
Soberano!
Por
la
energía
de
Tu
gracia,
este
universo
entero
se
me
presenta
desde
ahora
como
idéntico
a
Ti.
Tu
eres
eternamente
mi
propio
Ser;
así
la
totalidad
de
las
cosas
son
para
mi
idénticas
al
Ser.
3.-
En
Ti,
Señor,
mi
propio
Ser,
que
penetras
todo,
el
miedo
de
la
transmigración
ya
no
tiene
razón
de
ser,
incluso
cuando
subsistiesen
realmente
una
multitud
de
actividades
forjando
terrores,
desorientaciones
e
intolerables
dolores.
4.-
Oh
Exterminador,
no
pongas
sobre
mi
esa
mirada
cargada
de
una
espantosa
cólera,
sobre
mí
en
quien
adoración
y
contemplación
del
Señor
confieren
una
inmutable
estabilidad,
sobre
mí
que
soy
idéntico
a
la
energía
de
Bhairava
el
destructor
(de
la
ignorancia).
5.-
Así
las
espesas
tinieblas
son
dispersadas
por
los
rayos
del
Tu
Consciencia
cuando
Tu
te
acercas,
Señor!
Ya
nunca
más
temeré
las
artimañas
demoníacas
del
exterminador,
de
Yama
(divinidad
de
la
muerte),
ni
de
la
muerte
¡Gloria
a
Ti!
6.-
Yo,
Realidad
misma
del
conjunto
de
objetos
contemplados
en
tanto
que
irradiación
de
la
verdadera
Consciencia
manifestada,
es
en
Ti
donde
yo
accedo
al
apaciguamiento,
en
Ti,
el
Ser
colmado
a
profusión
por
el
supremo
néctar
de
todas
las
cosas.
7.-
Oh
Señor,
cuando
el
estado
de
impureza
dispensador
de
excesivos
tormentos
entra
en
el
campo
de
mi
pensamiento,
en
ese
mismo
instante
surge
de
mi
la
lluvia
del
supremo
néctar
que
celebra
la
alabanza
de
Tu
unicidad.
8.-
Si,
oh
Shiva,
ascesis,
baños,
alabanzas,
dones,
rompen
el
tormento
de
la
existencia,
el
dichoso
cuidado
de
Tu
revelación
extiende
en
el
corazón
una
marea
de
felicidad.
9.-
Oh
Señor
Bhairava,
esa
Consciencia
mía,
danza,
canta,
se
regocija
grandemente,
porque
desde
que
ella
ha
tomado
posesión
de
Ti,
el
Bienamado,
la
realización
del
sacrificio
único,
el
de
la
igualación,
tan
arduo
para
algunos,
para
ella
es
fácil.
Durante
la
quincena
lunar
sombría,
el
décimos
día
del
mes
Pausa,
en
el
año
68,
Abhinavagupta
compuso
esta
alabanza
según
la
cual
el
omnipresente
por
compasión
apacigua
instantáneamente
en
el
ser
humano
la
dolorosa
quemadura
inherente
al
desierto
del
devenir.
ANUTTARÂSTIKÂ
(OCHO
ESTANCIAS
SOBRE
LO
INCOMPARABLE)
1.-
Aquí
no
hay
ninguna
necesidad
de
progreso
espiritual
ni
de
contemplación,
ni
de
habilidad
de
discurso,
ni
de
preguntas,
ninguna
necesidad
de
meditar,
ni
de
concentrarse,
ni
de
ejercitarse
en
las
plegarias
murmuradas.
¿Cuál
es,
dime,
la
Realidad
última
absolutamente
cierta?
Escucha
esto:
no
tomes
ni
dejes,
tal
que
tu
eres
(en
el
Ser
real,
no
en
el
«yo
sicológico»),
disfruta
gozosamente
de
todo.
2.-
Desde
el
punto
de
vista
de
la
Realidad
absoluta,
no
hay
transmigración.
¿Como
entonces
puede
haber
obstáculos
para
los
seres
vivos?
Puesto
que
el
ser
libre
no
ha
tenido
nunca
obstáculos,
intentar
liberarlo
es
tarea
vana.
No
hay
ahí
más
que
la
ilusión
de
la
sombra
imaginaria
de
un
demonio,
la
cuerda
tomada
por
la
serpiente
que
produce
una
confusión
sin
fundamento.
No
rechaces
nada,
no
cojas
nada,
bien
establecido
en
ti
mismo,
tal
que
tu
eres
(en
cuanto
Consciencia,
no
como
«yo
sicológico»),
pasa
el
tiempo
agradablemente.
3.-
En
lo
Inexpresable,
¿qué
discurso
puede
haber
y
que
camino
diferenciaría
adorado,
adorador
y
adoración?
En
verdad
¿para
quién
y
cómo
un
progreso
se
produciría,
o
incluso
quién
penetraría
por
etapas
en
el
Ser?
¡Oh
Maravilla!
Esta
ilusión,
aunque
diferenciada,
no
es
otra
que
la
Consciencia
sin
segundo.
¡Oh!
Todo
es
esencia
muy
pura
vivenciada
por
uno
mismo.
Así,
no
te
crees
preocupaciones
inútiles.
4.-
Esta
felicidad
no
es
como
la
borrachera
de
vino
o
la
de
las
riquezas,
ni
incluso
semejante
a
la
unión
con
la
amada.
La
aparición
de
la
Luz
consciente
no
es
como
el
haz
de
luz
que
da
una
lámpara,
el
sol
o
la
luna.
Cuando
uno
se
libera
de
las
diferenciaciones
acumuladas
(cultivadas
desde
el
pasado),
el
estado
de
dicha
es
una
alegría
comparable
al
liberarse
del
peso
de
un
fardo,
la
aparición
de
la
Luz
es
la
adquisición
de
un
tesoro
perdido:
el
ámbito
de
la
universal
no-dualidad.
5.-
Atracción
o
repulsión,
placer
y
dolor,
levantarse
y
acostarse,
exaltación
y
abatimiento,
etc.,
todos
estos
estados
de
los
que
participan
las
formas
del
universo
se
manifiestan
como
diversificados
pero
en
su
naturaleza
ellos
no
son
distintos.
Cada
vez
que
tu
coges
la
particularidad
de
uno
de
esos
estados,
atento
enseguida
a
la
naturaleza
de
la
Consciencia
como
idéntica
a
ese
estado
¿por
qué
,
lleno
de
esa
contemplación,
no
te
regocijas?
6.-
La
efectividad
de
lo
que
existe
actualmente
no
existía
antes;
de
manera
súbita,
en
efecto,
surgen
siempre
las
cosas
en
este
mundo
(a
cada
instante).
¿A
qué
realidad
pueden
ellas
pretender,
así
mezcladas
por
la
confusión
deformante
del
estado
intermedio?
¿Qué
realidad
hay
en
lo
irreal,
lo
inestable,
lo
falsificado,
en
un
amontonamiento
de
apariencias,
en
el
error
de
un
sueño?
Permanece
fuera
de
la
imperfección
propia
a
las
angustias
de
la
duda
y
despiértate.
7.-
Lo
Innato
no
puede
estar
sujeto
a
la
marea
de
las
manifestaciones
de
objetos;
estos
no
se
manifiestan
más
que
al
experimentarlos
tú.
Aunque,
por
naturaleza,
estén
privadas
de
realidad,
en
un
instante,
a
causa
de
un
error
de
percepción,
estas
manifestaciones
parecen
formar
parte
de
lo
real.
Así
brota
de
tu
imaginación
la
grandeza
de
este
universo
puesto
que
no
existe
otra
causa
para
su
aparición.
Es
por
eso,
por
Tu
propia
gloria,
que
Tu
resplandeces
en
todos
los
mundos
y,
aunque
único,
Tu
eres
la
esencia
de
lo
múltiple.
8.-
Cuando
surge
la
Consciencia
en
tanto
que
contacto
inmediato
con
uno
mismo,
entonces
lo
real
y
lo
irreal,
lo
poco
y
lo
abundante,
lo
eterno
y
lo
transitorio,
lo
que
está
manchado
por
la
ilusión
y
lo
que
es
la
pureza
del
Ser,
aparecen
radiantes
en
el
espejo
de
la
Consciencia.
Habiendo
reconocido
todo
esto
a
la
luz
de
la
esencia,
Tu
cuya
grandeza
está
fundamentada
en
Tu
experiencia
íntima,
goza
de
tu
poder
universal.
PARAMÂRTHADVÂDASIKÂ
(DOCE
ESTANCIAS
SOBRE
LA
REALIDAD
SUPREMA)
1.-
Degusta
permanentemente
la
paz
y
abstente
del
perpetuo
parloteo
vano,
evitando
las
expresiones
«quien
eres
tu,
porque,
como,
que
es
esto»
que
obstruyen
el
camino.
Lo
que
se
revela
entonces
como
la
luz
que
ilumina
las
distinciones
entre
existencia
y
no-existencia,
es
la
manera
de
ser
sin
fisura,
el
Vacío,
el
ámbito
de
Shiva
la
Realidad,
el
supremo
brahman.
¿Qué
aprehensión
objetiva
se
revelaría
de
ahí?
(que
concepto
podría
surgir
ahí,
no
pudiendo
ningún
concepto
reflejar
ese
estado)
2.-
Una
vez
apartado
lo
irreal
(lo
inexistente),
lo
real
(lo
existente)
a
lo
que
accedes
es
a
su
vez
la
realidad.
Irreal
o
real,
¿no
es
a
eso
Real
mismo
(la
Consciencia)
a
lo
que
tu
eres
idéntico?
3.-
Dices
tu:
«Toda
manifestación
es
independiente
y
no
debida
a
la
Luz
de
la
consciencia»,
pero
entonces
¿si
esta
diferenciación
ella
misma
se
manifiesta,
no
se
manifiesta
ella
también
en
la
Luz?
Abandona
entonces
la
tendencia
a
dividir
esta
división.
Si
en
el
transcurso
de
un
sueño,
uno
sabe
que
es
un
sueño,
no
se
experimenta
temor
cuando
se
recibe
una
cuchillada,
cuando
uno
se
ahoga,
se
quema
o
queda
encerrado,
porque
eso
no
es
ahí
mas
que
un
juego.
4-5.-
Cualesquiera
que
sean
las
cosas
que
se
hagan
bajo
la
inclinación
del
conocimiento
y
de
la
actividad,
dime
¿en
que
se
distinguen
de
lo
inconsciente?
Y
si
lo
inconsciente
vibra
también
¿no
forma
parte
del
ámbito
de
la
Consciencia sin
dualidad,
ilimitada,
eterna,
y
que,
eminentemente
real,
escapa
a
toda
captación
racional?
Si
eres
Tu
el
que
manifiestas
las
cosas
¿cómo
la
ilusión
se
extendería
por
su
intermediación?
Y
si
las
cosas
manifiestan
esta
ilusión
¿no
es
gracias
a
Ti?
Lo
que
importa
aquí,
en
esta
objetividad,
es
que
Tu
expansión
(expresión)
permanece
indivisa.
Si
no
(si
tu
no
eres
el
que
manifiesta
las
cosas),
las
cosas
no
tienen
existencia.
En
los
dos
casos
no
se
puede
plantear
una
existencia
objetiva
distinta
de
la
Consciencia.
Tu
grandeza
siempre
satisfecha,
espontánea,
que
nada
restringe,
que
pulveriza
el
error,
¡oh
maravilla!
¡Tu
permaneces
perpetuamente
iluminado!
6.-
¡Vuelve
tu
mirada
hacia
el
exterior
pasando
más
allá
del
sendero
de
lo
visible!
(eso
dices
tu)
¡Vamos!
Se
trata
de
ese
engaño
que
puede
parecerse
a
bhairavîmudrâ
(una
práctica
preparatoria):
el
cielo
de
la
Consciencia
libre
de
dualidad
no
está
ni
en
el
exterior
ni
en
el
interior,
el
ámbito
de
la
expansión
no
les
deja
lugar.
7.-
Todo
aquello
que
se
revela
cuando
la
marea
de
impresiones
se
derrama
con
vehemencia
(impresiones
como
el
terror,
la
sorpresa,
la
cólera...)
es
ahí
mismo
donde
debes
de
mirar
con
intensidad:
si
tu
apareces
y
apareces
una
y
otra
vez
al
comienzo,
en
medio
y
al
final
¡el
universo
diferenciado
se
disolverá!
8.-
La
confusión
se
hace
más
densa
cuando
uno
se
preocupa
de
dudas
relativas
al
dolor.
Los
obstáculos,
debidos
a
los
errores
surgidos
al
mismo
tiempo
que
su
causa,
determinan
su
extrema
variedad.
Se
la
compara
(la
confusión)
a
la
fortaleza
de
los
gandharva.
Si
la
confusión
no
se
manifestase
en
el
firmamento
de
la
Consciencia
-receptáculo
de
la
alternativa
dualismo
y
no-dualismo-
¿en
que
otro
lugar
brillaría
y
cual
sería
su
último
refugio;
ella
(la
confusión)
cuya
esencia
es
la
multiplicidad?
9.-
Esta
marea
de
impresiones,
verdaderamente
irreal
durante
el
sueño,
en
el
estado
de
sueño
profundo
no
se
manifiesta;
¿cómo
podríamos
captar
ese
flujo
de
impresiones
en
el
firmamento
de
la
Consciencia
sin
límite
y
más
allá
de
estos
estados
(en
el
cuarto
estado;
turya)?
Si
Tu
dices
que
incluso
en
la
vigilia,
el
conjunto
de
objetos
como
la
tierra
existen,
ahí
entonces,
ocurre
que
gracias
al
Conocimiento,
si
esta
marea
llega
a
su
fin,
en
un
instante
y
en
el
lugar
que
sea,
el
conjunto
(de
objetos)
no
aparecerá
ya
más
separado
de
la
Consciencia,
así
¿cómo
en
la
vigilia,
la
Consciencia
podría
estar
dividida?
10.-
Cualesquiera
que
sean
las
apariencias
manifestadas
a
la
Consciencia,
son
percibidas
en
Mi,
supremo
firmamento;
porque
esos
rayos
que
están
en
las
apariencias
(en
su
especificidad),
es
en
Mi
que
brillan
indiferenciados
en
el
Esplendor
eterno.
Y
esta
Luz
consciente
ilimitada,
autónoma,
verdadera,
infinita,
sin
imperfección,
eterna,
espontánea,
que
dispersa
las
tinieblas
formadas
por
dos
enemigos
irreconciliables:
(dualismo
y
no-dualismo)
¡esa
Luz
soy
yo!
11.-
Que
el
tiempo
suscita
las
parcelas
temporales
acumulándolas;
que
el
Creador
crea
con
pasión,
o
que
el
Dios
del
amor
sacude
intensamente
el
corazón
humano
según
las
prescripciones
de
Shiva,
de
quien
depende;
que
este
bullicio
de
juego
divino
que
tiene
como
único
refugio
el
cielo
constituye
las
fases
sucesivas
que
llevan
a
la
revelación
del
Ser;
o
que
el
refugio
sea
el
cuerpo,
etc...
¿no
es
en
la
gran
ilusión
del
cambio
universal
donde
yo
percibo
todo
ello?
12.-
¡Eh,
quien
sea!
Que
yo
lo
devoro.
¡Eh,
quien
sea!
Que
lo
mato
acto
seguido.
¡Eh,
alguien!
Que
yo
lo
bebo
¡yo
que
estoy
ebrio
de
haber
ingerido
el
vigor
supremo
de
la
suprema
Consciencia!
(al
ser
la
Consciencia,
soy
el
actor
en
el
teatro
del
universo)
Shiva
el
león,
Dios
encantador,
habiendo
accedido
a
la
mayor
de
las
satisfacciones
paseándose
en
los
bosques
impenetrables
de
su
propio
ámbito,
ha
hecho
bramar
al
elefante
de
esta
vil
diferenciación.
Su
aparición
fulgura
para
los
seres
sagaces
que
han
llegado
a
las
cimas
del
Despertar
al
mismo
tiempo
que
pone
en
fuga
a
los
malos
-los
chacales-
y
que
disipa
el
miedo
inherente
a
la
existencia.
MAHOPADESAVIMSATIKA
(LA
VEINTENA
RELATIVA
A
LA
GRAN
ENSEÑANZA)
1.-
Gloria
a
Ti,
mi
propio
Ser
dotado
de
energías
infinitas,
luz
consciente
y
felicidad
eternas;
gloria
a
Ti
bajo
tu
forma
concreta
de
universo
cuya
esencia
transciende
el
despliegue
de
los
fenómenos.
2.-
En
quien
Tu
eres
Tu,
y
yo
soy
yo;
en
quien
Tu
solo
eres
y
yo
no
soy;
y
en
quien
no
hay
ni
Tu
ni
yo
¡a
Ese
es
al
que
yo
alabo!
3.-
Siempre
he
buscado
ardientemente
a
ese
Tu
y
a
ese
Si-mismo,
en
el
interior
del
cuerpo.
Cuando
ni
el
Tu
ni
el
Si-mismo
son
percibidos,
entonces
Tu
solo
eres
percibido.
4.-
Habiéndote
contemplado
bajo
la
forma
de
Si-mismo,
ahora
que
he
llegado
a
ser
idéntico
a
Ti,
de
mi,
Tu
adorador,
va
la
alabanza
a
Ti,
a
mi.
5.-
Decir:
«hay
que
hacer
esto»
no
es
más
que
un
giro
de
estilo,
ya
que
para
el
que
es
idéntico
a
Ti
¿de
dónde
vendría
la
absorción,
en
quién
y
de
que
manera
sería
ella
posible?
6.-
Decir:
«yo
soy
Tu
y
Tu
eres
yo»,
nunca,
en
ningún
lugar
existe
una
tal
distinción
entre
nosotros
dos.
Un
semejante
estado
de
diferenciación
delata
en
verdad
el
deseo
de
apropiarse
del
samâdhi.
7.-
Decir:
«Tu,
yo,
es
él,
etc...»,
estas
expresiones
ciertas
siempre
en
Ti,
no
encuentra
su
lugar
en
Ti
(como
existencia
separada);
con
más
razón
el
universo
no
está
de
Ti
separado.
8.-
Desde
que
se
ha
degustado
el
sabor
de
Tu
Amor,
ya
no
hay
necesidad
de
discurrir
a
propósito
de
lo
diferenciado.
Uno
debería
incluso
avergonzarse
de
decir
cosas
como:
«este
Todo
es
uno
y
apacible».
9.-
En
la
expansión
de
Tu
esencia
surges
Tu,
yo
y
el
universo
entero.
En
su
repliegue,
ya
no
hay
más
ni
Tu,
ni
yo,
ni
el
universo.
10.-
Tu
te
revelas,
por
Tu
propia
voluntad,
como
un
actor
asumiendo
los
papeles
que
le
son
propios:
vigilia,
sueño,
sueño
profundo,
etc.;
pero
en
realidad
Tu
no
interpretas
ningún
papel.
11.-
El
universo
se
despierta
cuando
Tu
Te
despiertas
y
se
duerme
cuando
Tu
Te
adormeces.
Así,
todo
lo
existente
y
todo
lo
inexistente,
es
idéntico
a
Ti.
12.-
La
lengua
se
agota
en
vano
recitando
Tu
nombre;
el
pensamiento
se
agota
evocándote.
¿Cómo
ver
lo
sin-forma
y
como
nombrar
lo
sin-atributo?
13.-
¿Para
que
bueno
el
rito
para
«El
Perfecto»
y
un
pedestal
para
«El
Soporte
Del
Universo»?
¿Porqué
agua
lustral
y
ablución
para
«El
Límpido»,
y
enjuague
de
boca
para
«El
Muy
Puro»?
14.-
¿Para
que
bueno
el
baño
ritual
para
«El
Inmaculado»,
un
vestido
para
«Aquel
Que
Contiene
El
Universo
En
Su
Cuerpo»?
¿Para
que
bueno
un
aceite
perfumado
para
«Aquel
Que
No
Puede
Ser
Ungido»
y
un
adorno
para
«El
Seductor»?
15.-
¿Para
que
bueno
un
cordón
sagrado
para
«Aquel
Que
No
Depende
De
Nada»,
una
flor
para
«Aquel
Que
No
Necesita
Perfumes»,
el
incienso
para
«Aquel
Que
No
Tiene
Aliento»,
una
lámpara
para
«Aquel
Que
No
Tiene
Ojos»?
16.-
¿Para
que
bueno
una
ofrenda
de
alimento
para
«El
Eternamente
Colmado»
o
las
bayas
para
«El
Omnipresente»?
¿Para
que
hacer
la
circunvalación
ritual
de
«El
que
es
Infinito»
y
saludar
a
«El
Sin-Segundo»?
17.-
¿Para
que
una
ofrenda
de
luces
para
«El
Omnipresente
Que
Resplandece
Con
Su
Propia
Luz»?
¿Para
que,
para
«El
Incognoscible»,
componer
un
himno
de
alabanza
hecho
de
palabras
del
Veda?
18.-
¿Cómo
habría
en
el
interior
y
en
el
exterior
liberación
para
«El
Perfecto»?
¿Y
como
se
haría
una
oblación
para
«El
Que
Reside
Por
Todo
Indiferenciado»?
19.-
¿De
donde
vendría
un
salario
ritual
para
«El
Que
Posee
Todo»,
una
libación
para
satisfacer
a
«El
Eternamente
Satisfecho»,
o
el
rito
final
para
«El
Omnipenetrante»,
el
rito
expiatorio
para
«El
Imperceptible»?
20.-
Con
un
pensamiento
bien
unificado,
que
uno
fije
las
potencias
del
alma
en
Dios,
maestro
universal.
Solamente
de
esta
manera
se
realiza
en
todo
tiempo
y
en
todas
las
circunstancias
la
suprema
adoración.
DEHASTHADEVATÂCAKRASTOTRA
(HIMNO
DE
ALABANZA
A
LAS
FACULTADES
DIVINIZADAS
SITUADAS
EN
EL
CUERPO)
1.-
Alabo
a
Ganapati
(el
que
quita
los
obstáculos)
que
se
encarna
en
el
aliento
inspirado;
venerado
al
comienzo
de
cientos
de
tratados;
El
se
complace
en
donar
las
gracias
deseadas;
El
a
quien
se
alaba
por
una
multitud
de
buenas
y
de
malas
disposiciones
del
alma.
2.-
Alabo
a
Vatuka,
llamada
aliento
expirado
que
suprime
la
aflicción
de
sus
devotos
y
cuyos
pies
de
loto
son
venerados
por
el
linaje
de
los
siddha
(los
seres
liberados),
la
asamblea
de
yoguinî
y
los
mejores
de
entre
los
héroes.
3.-
Alabo
a
Bhairava-felicidad,
pleno
de
Consciencia,
que
reside
en
el
loto
del
corazón.
Es
a
El
a
quien
las
divinidades
de
los
sentidos
veneran
perpetuamente
por
la
ofrenda
de
los
gozos
de
sus
propios
objetos.
4.-
Alabo
sin
descanso
a
ese
puro
y
verdadero
maestro
(sadguru)
cuya
naturaleza
es
la
vigilancia
incesante,
puesto
que,
por
su
poder
espiritual,
el
universo
entero
se
revela
a
los
amantes
como
el
camino
de
Shiva.
5.-
Alabo
a
esta
Bhairavî-felicidad
que,
bajo
la
forma
de
toma
de
consciencia,
se
regocija
sin
descanso
en
suscitar,
manifestar
y
reabsorber
el
universo.
6.-
Yo
me
inclino
una
y
otra
vez
ante
esta
Brahmânî
cuya
naturaleza
es
el
intelecto
intuitivo
(buddhi).
Situada
en
el
pétalo
del
este,
ella
adora
a
Bhairava
con
las
flores
de
la
certeza.
7.-
Yo
alabo
permanentemente
a
esta
madre
Sâmbhavî
que,
bajo
la
forma
del
yo
empírico,
erguida
en
el
pétalo
del
sur-este,
ofrece
a
Bhairava
las
flores
del
egoísmo
y
del
orgullo.
8.-
Alabo
perpetuamente
a
la
joven
Kumârî
cuya
naturaleza
es
pensamiento.
Permaneciendo
en
el
pétalo
del
sur,
ella
ofrece
como
culto
a
Bhairava
las
flores
de
la
duda
(y
los
pensamientos
fluctuantes
e
indecisos).
9.-
Me
inclino
perpetuamente
ante
esa
energía
Vaisnavî
que
tiene
como
naturaleza
el
sonido.
Manteniéndose
en
el
pétalo
del
sur-oeste,
ella
adora
a
Bhairava
con
las
flores
de
los
sonidos
más
melodiosos.
10.-
Saludo
a
esta
Vârâhî
que
se
reviste
con
la
apariencia
de
la
piel.
Erguida
en
el
pétalo
del
oeste,
ella
regocija
a
Bhairava
con
las
flores
del
tacto
que
embriagan
al
corazón.
11.-
Alabo
a
esta
Indrânî,
visión
encarnada;
tumbada
sobre
el
pétalo
del
noroeste
ella
venera
a
Bhairava
con
las
flores
de
los
más
bellos
colores
y
formas.
12.-
Yo
saludo
esta
Câmundâ
a
la
que
se
llama
«lengua»,
tumbada
en
el
brote
del
norte,
que
siempre
rinde
un
culto
a
Bhairava
con
los
diferentes
alimentos
de
seis
sabores.
13.-
Yo
me
inclino
constantemente
ante
Mahâlaksmî
que
se
llama
nariz,
sentada
en
el
pétalo
noreste
y
que
adora
a
Bhairava
con
perfumes
variados.
14.-
Alabo
continuamente
al
Espíritu,
señor
del
cuerpo
llamado
Si-mismo,
dispensador
de
poderes
sobrenaturales.
Honorado
en
los
seis
darsana,
él
se
alía
a
las
treintiséis
modalidades
(tattvas)
de
lo
real.
15.-
Yo
que
resido
en
todo,
canto
así
a
la
Rueda
perpetuamente
surgiente
de
las
divinidades
de
mi
cuerpo
(las
facultades
y
sentidos
divinizados),
Rueda
vibrante,
esencia
de
la
Experiencia,
siempre
próxima.